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l líder del Frente Renovador de la Concordia, Carlos Rovira, se manifestó este jueves al mediodía a través de una carta de opinión enviada a varios medios sobre el caso que involucra al diputado provincial Germán Kiczka. En su carta califica como "aberrantes" los hechos que habría cometido, según surge de la investigación judicial, el diputado.
También le achaca cierta complicidad moral y ética al espacio político que lo llevó a la diputación, dando así un golpe por elevación a Pedro Puerta, líder de Activar y a los demás socios de Juntos por el Cambio, lista por la que en 2021 Kiczka llegó a la Legislatura.
Las palabras del líder del oficialismo provincial se hacen visibles horas antes de que la Legislatura sesione y deba decidir si trata sobre tablas su pedido de expulsión al diputado de Activar que es investigado por tenencia y distribución de material de abuso infantil, o si lo pasan a comisión para posterior tratamiento.
En el texto asegura que "la distribución de material de abuso sexual infantil representa un flagelo social imperdonable que debe ser condenado con toda la fuerza de las instituciones, que Misiones las tiene funcionando con excelencia".
Y agrega que "por eso nuestro espacio político promovió, sin dilación y sin dudas, la expulsión y el corte definitivo de la representatividad de este diputado y del partido político que lo sustentó, considerando también que deben caber penas para el Frente Electoral o la Alianza que lo validó".
Además remarca que "un antecedente tan nefasto que solo se superará con la prevención, el análisis, el conocimiento por parte del conjunto de la sociedad y con la solvencia de la justicia para, al menos, atenuar los efectos devastadores que hoy repercuten en todo el país y el mundo".
La carta completa de Carlos Rovira
La distribución de material de abuso sexual infantil representa un flagelo social imperdonable que debe ser condenado con toda la fuerza de las instituciones, que Misiones las tiene funcionando con excelencia.
Por eso nuestro espacio político promovió, sin dilación y sin dudas, la expulsión y el corte definitivo de la representatividad de este diputado y del partido político que lo sustentó, considerando también que deben caber penas para el Frente Electoral o la Alianza que lo validó.
Un antecedente tan nefasto que solo se superará con la prevención, el análisis, el conocimiento por parte del conjunto de la sociedad y con la solvencia de la justicia para, al menos, atenuar los efectos devastadores que hoy repercuten en todo el país y el mundo.
En esa línea, desde la Cámara de Diputados he promovido la primera Fiscalía para perseguir este tipo de delitos, junto al endurecimiento de las penas y la debida corresponsabilidad política de los partidos y frentes que incorporan a estos sujetos a la actividad, como correctivo.
Es claro que no han cumplido la tarea de ser los primeros filtros de antecedentes a la hora de confeccionar su oferta electoral. Hubo señales hace tiempo, que ahora algunos integrantes de la sociedad se animan a revelar.
Pero también es cierto que en este caso se trata de sociópatas que disimulan con astucia su comportamiento y cuentan con afinidad en su núcleo íntimo, afinidad en sus costumbres, sus modos de vida.
Podría decirse que constituyen una suerte de asociación para el engaño, la manipulación, la estafa moral y política, escondiendo sus vicios y sus crímenes.
Se ofrecen engañosamente a incautos electores, primero y después al resto de la sociedad, como impulsores de supuestos cambios ayudados con propaganda armada para conseguir sus fines perversos.
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